Hasta once espacios escénicos de la Part Forana amenazan con dejar de programar, a partir de septiembre, a compañías de teatro a través del Circuit d'Arts Escèniques de Mallorca (CAEM). El motivo: no están de acuerdo con «la composición anómala» de esta herramienta, ya que «las compañías y asociaciones de actores y actrices tienen una mayoría que no permite introducir ningún cambio en la dinámica teatral», explican conjuntamente en un comunicado.
La polémica explotó hace unos meses cuando en una asamblea del circuito se aprobaron algunas medidas, como la presencia mayoritaria de los teatros públicos en la junta directiva del CAEM o que las compañías, representadas por la asociación de empresas productoras (ABETD), la asociación de empresas de Balears (ADEBAE) y las asociación de actores (APAAIB), dejasen de tener voto en el circuito. En junio, ésta y otras decisiones, explican en la nota, fueron revocadas por la junta directiva del Circuit d'Arts Escèniques y ahora los teatros de Artà, Manacor, Son Servera, Santanyí, Santa Margalida, Vilafranca, Sa Pobla, Muro, Capdepera, Calvià y Alcúdia se manifiestan juntos con el propósito de acabar con «años de inmobilismo» por parte «de aquellos que hace muchos años que están» y hacer posible «la salida de nuevos espectáculos y de nuevas compañías que favorezcan la calidad teatral de las Islas y fomenten la creación de nuevos públicos». La gerente del Teatre d'Artà, Maribel Sancho, aseguró que desean «un circuito democrático». En los de otras comunidades autónomas, las compañías no tienen voto en las juntas, sostienen en su nota. «Nosotros no estamos contra las compañías, ni queremos enfrentarnos a ellas», aclara Sancho.
Los gerentes de estos espacios sostienen que, «después de años reivindicando cambios en la estructura interna del circuito, hemos dicho basta. Queremos un circuito que no tome las decisiones de espaldas a los teatros».
El comunicado ha sido remitido al conseller insular de Cultura, Joan Font, y están a la espera de su respuesta.