La consulta de documentación custodiada por el Arxiu General de Consell de Mallorca se agiliza. La institución insular a puesto en marcha unas obras de mejora y ampliación de sus espacios que permitirán al centro acoger toda la documentación que, ante las limitaciones de espacio, hasta ahora se encontraba dispersa.
Desde hace un año no entra ni un papel al archivo y, desde 2004, la institución insular ha destinado casi 10.000 euros al mes al alquiler de una nave auxiliar para custodiar hasta 1.500 metros lineales de documentos administrativos, de historia, derecho y archivística. Esta dispersión ralentizaba el acceso de investigadores y de la Administración al material. «En algunos casos, se tardaban dos días porque había que ir a buscarlo a la nave, traerlo...», comentó la directora del centro, Isabel Garau, quien detalló que el centro asila documentos desde el siglo XIII -los más antiguos procedentes del antiguo Hospital de Santa Catalina- hasta la actualidad. «Es un archivo muy vivo» en el que se conservan también todos los documentos administrativos procedentes de la actividad de los diferentes órganos y departamentos del Consell. Sin embargo, una comisión de evaluación, con «la ley en la mano», estudia, analiza y determina de cuáles se puede prescindir.
Archivadores
Este proyecto se desarrollará en dos fases y la primera, presupuestada en 161.500 euros, ha consistido en el acondicionamiento de una de la salas y la instalación de unos archivadores compactus que permiten aprovechar casi un cincuenta por ciento más el espacio. En estos momentos, los técnicos están en plena reorganización interna de los depósitos. En esta fase se colocarán 1.500 metros lineales de material procedentes de la nave alquilada y 1.000 más acumulados en oficinas del Consell.
Gracias a los nuevos archivadores, se podrá reducir considerablemente el alquiler, un gasto que se acabará cuando concluya la segunda fase, a desarrollar este año con un presupuesto similar. En este caso, se habilitará otra sala y se instalarán los mismo archivadores a fin de reunir todo el material, entre el que podemos encontrar actas de plenos, cédulas de habitabilidad, documentación de adopciones, planes de ordenación, cartelería, etc.
El espacio es un problema que podría repetirse a medio plazo (al año se generan cerca de 400 metros lineales de documentos), sin embargo, el avance del soporte electrónico podría poner fin, en un futuro, a las limitaciones físicas.
El Arxiu del Consell se centraliza con la mejora de sus espacios
Ana Largo | Palma |