Después de dos años y cuatro meses, Joana Lluïsa Mascaró pone punto y final a su etapa de gestora al frente de la Conselleria de Cultura i Patrimoni del Consell de Mallorca, «una decisión meditada» tras la «saturación» por compaginar esta tarea con la de portavoz del Bloc y vicepresidenta del Consell. Le sustituirá Joan Font.
Mascaró sostiene que no sacrifica la cultura para hacer política de partido. «No quería que mi aportación política se viera mermada ni tampoco mi gestión en el Consell. La gestión cultural es importante y por ello estará al frente Joan Font».
La ya ex consellera no se va satisfecha porque «creo se puede hacer más», pero sí se siente orgullosa de «haber impulsado proyectos importantes con los pocos recursos disponibles en estos tiempos de crisis». Por citar algunos proyectos de esta etapa «enriquecedora», Mascaró recuerda la primera programación estable del Teatre Principal de Palma tras su reapertura, la rehabilitación del Castell de Alaró, el proyecto del Centre de Fotografia Toni Catany, la firma del programa Cultura en xarxa con 14 ayuntamientos, que tuvo lugar ayer; entre otros.
Para Joana Lluïsa Mascaró, la cultura no es pecata minuta, «la industria cultura es importante, en el siglo XXI forma parte de la calidad de vida de la sociedad y es parte importante de la política del PSM y del Bloc y continuará siendo».
Hace unos días, el Partido Popular criticó el déficit del Teatre Principal. Sobre ello, Mascaró dijo que «hay déficit, todos los gobiernos tienen déficit, pero había que valorar dos cosas: tenerlo y, en este caso, seguir ofreciendo programación, o no hacer nada o poco. En tiempos de crisis se invierte mucho en crear puestos de trabajo. La cultura da trabajo a mucha gente». Mascaró confirmó que el director gerente del Principal, Joan Arrom, presentó su dimisión, pero no se aceptó. «Su gestión es buena» y está aprobada por el patronato, donde el PP tiene presencia, recordó.