Tan solo un mes después de la inauguración del museo modernista Can Prunera de Sóller ya han sido varios los artistas y coleccionistas que han querido aportar su granito de arena a la colección de arte contemporáneo de la exposición permanente. Ayer, el presidente de la Fundación Tren de l'Art, Pere A. Serra; los miembros del patronato de la misma Vicenç Sastre y Óscar Mayol; el director de Can Prunera, Rogelio Araújo, y la directora de Relaciones Públicas, Antònia Mª Miró, recibieron cuatro nuevas piezas, tres pinturas y una escultura, donadas por dos artistas y dos coleccionistas privados.
Dicha donación está compuesta, por un lado, por la escultura Almancha, del artista José Luis Sánchez, que ha sido cedida por el fundidor Guillermo Ponce. Pere A. Serra hizo especial mención a la colaboración con este coleccionista, ya que se espera que ceda más obras que se exhibirán en el jardín de la casa modernista. En cuanto a las pinturas, los artistas Andreu Maimó y Àngel Baldovino aportaron, respectivamente, las obras Figuera de Can Caubó y Formas del tiempo, mientras que Magdalena Seguí donó una pintura creada en 1975 por Joan Palet titulada Noia.
Pere A. Serra destacó la importancia de estas donaciones, «tan sólo unas semanas después de la inauguración de Can Prunera», y puso de relieve el referente en el que debe convertirse el nuevo museo para el arte contemporáneo.
El acto coincidió con la visita al museo del nuevo presidente del Partido Popular de las Islas, José Ramón Bauzá; el portavoz del partido, Carlos Simarro, y Lluís Ramis de Ayreflor.