Paseando ayer por la Fira del Llibre, uno podía comprobar que si hay un bilingüismo real en Balears, ese se encuentra, sobre todo, en el mundo de los libros, y también en quienes los compran o los leen.
Como en anteriores ediciones, este año conviven los grandes éxitos con las últimas novedades, los clásicos de siempre y las ediciones para coleccionistas.
Seguramente, una de las mayores novedades era poder ver muchos libros sobre el Barça, como Messi, el nen que no podia créixer, o Raó Blaugrana. El Barça com a filosofia, o Pep Guardiola. Totes les claus del seu èxit.
También podían verse libros para mejorar nuestra salud, nuestra inteligencia emocional o nuestro estado de ánimo, lo cual no debe de ser demasiado fácil si uno hace caso de ensayos con títulos como El laberinto de la felicidad o Seguir sin ti.
Y junto a obras de clásicos como Paul Auster, José Saramago o Milan Kundera, o de imprescindibles como Stefan Zweig, podían comprarse las dos primeras novelas del malogrado escritor sueco Stieg Larsson, Los hombres que no amaban a las mujeres y La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, que se han convertido en un éxito rotundo a nivel mundial.
Para los niños, había, como siempre, muchos libros pensados sólo para ellos, de aventuras, de príncipes y princesas, de personajes televisivos y del cine, y también de hadas. Para los adultos, había, curiosamente, tres novelas con la palabra 'ángel' en el título, Àngeles y demonios, El juego del ángel o L'Àngel del no-res, aunque libros sobre duendes, la verdad, ay, no vi ninguno.