La ministra de Cultura, Àngeles González-Sinde, reconoció ayer en Barcelona «un desequilibrio entre la realidad de la sociedad catalana y la oferta cinematográfica en catalán», y consideró «normal que la Generalitat quiera corregirlo con una ley del cine».
La socialista se mostró «comprensiva con la nueva ley» que permitirá que la mitad de las películas que se proyecten en Catalunya lo hagan subtituladas al catalán. La ministra declaró, en una visita al Institut d'Estudis Catalans, que le preocupa que «el inglés acabe triunfando como lengua vehicular», y aclaró que «cada vez más lenguas y culturas de Europa pierden espacio en el mercado cinematográfico.»
De las descargas de películas en Internet, González-Sinde apuntó que «Europa tiene la oportunidad de proporcionar contenidos pero sin posibilidad de retorno económico, las opciones se pierden», y se sintió «preocupada por que la piratería se implante en el sector del libro».
En relación al litigio entre los gobiernos de Balears, Aragón, Valencia y Catalunya sobre la titularidad de los fondos del Archivo de la Corona de Aragón, con sede en Barcelona, la ministra comentó que «el patronato lleva mucho tiempo sin reunirse y ya está previsto un encuentro próximo», y destacó que «las decisiones se tomarán para garantizar que los ciudadanos puedan acceder a los documentos».