La brigada de Patrimoni el Consell de Mallorca asumirá la restauración de las capillas de la Cova de Sant Martí, en Alcúdia, así como de un aljibe situado en la misma finca. Lo confirmó ayer el director insular de Patrimoni, Gabriel Cerdà, después de reunirse con el rector de Alcúdia, Joan Pons, para buscar una solución a las pintadas que realizaron unos vándalos a finales de la pasada semana.
Patrimoni y Bisbat negociarán, además, con el Ajuntament la implantación, por primera vez, de un horario restringido de visitas que se dará a conocer el próximo 19 de abril, durante la tradicional romería. La cueva natural es propiedad del Obispado y está situada en una finca de titularidad municipal a la que se accede directamente desde la circunvalación del Port d'Alcúdia. Hasta ahora, y pese a disponer desde tiempos ancestrales de rejas que permiten protegerla de los intrusos, la cueva siempre permanecía abierta.
La cueva está ligada a los primeros cultos cristianos del norte de la Isla y se comunica con el exterior por una escalera excavada en la propia roca. En la sala grande encontramos dos capillas formadas por un arco de medio punto y con bóveda de crucería. De estilo gótico, tienen un altar con relieve en los que están representados Sant Martí y Sant Jordi. Los historiadores apuntan que fue construida después de la conquista catalana, durante los siglos XIII y XIV.