«Las preocupaciones son lógicas, pero son gratuitas porque no hay nada oficial ni ninguna decisión en firme». Con estas palabras, el director general de Formació i Aprenentatge Permanent, Miquel Mestre, quiso tranquilizar a todos aquellos que se han alarmado ante el anuncio de un posible cambio de sede para el Conservatori Professional de Música i Dansa de Mallorca. Un hecho que, además, provocó el lunes la dimisión de la Junta Directiva del centro, algo que «no acepté porque académicamente están haciendo un buen trabajo», apuntó Mestre. Esta misma semana se reunirá con el equipo directivo para tratar este tema y escuchar propuestas. Al problema de «masificación» del centro, «hay que buscarle soluciones, en positivo, y si eso pasa por cambiar de sede en un futuro, se hará, aunque el nuevo espacio deberá reunir las condiciones que se exigen para cursar estos estudios», reconoció Miquel Mestre, quien descartó la posibilidad de poner en marcha la segunda fase del edificio del conservatorio por una cuestión económica.
«Hace unas semanas se informó en un claustro de que buscaríamos soluciones al problema del espacio y las cosas se han mezclado. Nadie les ha planteado salir del edificio por salir», explica el director general, quien, de momento, descarta un cambio de sede del Professional, que ya cuenta con las aulas prefabricadas terminadas para acoger en breve a las alumnas de danza.
Por otro lado, el director general de Formació Professional explicó que el objetivo de la Conselleria es lograr duplicar, como mínimo, el número de alumnos del Professional para mantener la estructura del Superior, que en esto momentos lo integran cerca de 240. Evidentemente, ese propósito continuará generando problemas de espacio en este centro. «Hay que hablar y buscar soluciones, y los profesores también tienen que decir la suya», reconoció.