Visitaron decenas de países, a veces, simplemente para saciar el deseo de encontrarse frente a frente con la obra de sus referentes artísticos, como Paul Cézanne. Sin embargo, al matrimonio Bradbury, Dorothy y Robert, le sedujo Mallorca por completo, como les sucediera a otros artistas extranjeros en aquella época de mitad del XX. En concreto, Deià les cautivó, era el lugar idílico para estos artistas por la composición paisajística de mar y montaña, o la integración de la arquitectura en la naturaleza.
Dorothy y Robert Bradbury reciben ahora un especial reconocimiento en el Museu Krekovic de Palma, donde hoy, a las 19.00 horas, se inaugurará una retrospectiva de la obra de los dos artistas, comisariada por Catalina Fullana, Maria Antònia Frau y Pilar Serra.
Dorothy (San Francisco, 1913) falleció en los ochenta. Ahora esta exposición representativa de su trabajo podrá verse junto a la de su marido hasta el próximo 12 de julio. El color marca, sobre todo, los paisajes y los desnudos de la artista, que en su última etapa los combinó, introduciendo el cuerpo femenino, por ejemplo, en sus vistas de Deià.
Robert Bradbury (Portland, 1912) recuerda hoy, a sus 95 años, su llegada a Deià. «Era un lugar fresco, entonces era como ir atrás en el tiempo», comentaba ayer el artista. Atrapados por la luz mediterránea, sus obras hoy evocan aquel tiempo cuando «las Islas aún no habían sido descubiertas».
La exposición repasa la producción artística de Robert Bradbury, quien se dedicó durante unos años a la experimentación del color sobre la cerámica. Además, trabajó el óleo en paisajes, los motivos egipcios y persas, y se incorporó a la técnica del tapiz en grandes dimensiones.
El catálogo de Robert y Dorothy Bradbury ha sido editado por el Consell de Mallorca.