Pedro Riutort es un cineasta honesto, tenaz y con los pies en la tierra. Alberga aspiraciones, pero no es pretencioso. A la espera de una gran oportunidad para debutar en el largo, sigue entregándose con cariño y dedicación al cortometraje, formato en el que se ha labrado una valiosa trayectoria. Su nuevo proyecto se llama Nudos y acaba de empezar su rodaje en Mallorca.
Se trata de una obra de pequeño presupuesto escrita por él mismo y para la que se ha rodeado de su «familia» artística, el equipo técnico habitual y los actores Paloma Navarro, La Prohibida y Arturo Carrión, quienes ya protagonizaron su anterior trabajo, Carne de Gorila.
Nudos es la historia de un triángulo amoroso, en clave de «cine negro y metacine», cuyo punto de partida es «una conversación después de hacer el amor en un hotel». Tras el fulgor de la pasión, la relación entre los amantes, un escritor de guiones y su musa, se complicará cuando uno de ellos decida «cortar» con el otro utilizando argumentos de ficción.
El cortometraje conservará algunos de los elementos que hicieron de Carne de Gorila una obra tan peculiar, como el humor ácido, la alta chabacanería, el travestismo o el psicoanálisis. Sin embargo, el director se niega todavía a hablar de un sello 'Riutort' en pro de una mayor libertad estilística y conceptual.