La Catedral acogió ayer por la noche el concierto participativo de la Obra Social de La Caixa. Tras el éxito del año pasado, la entidad volvió a repetir el mismo esquema, que combina las voces profesionales con las amateur, y la misma obra, El Mesías, de Haendel.
Bajo la dirección de Josep Vila i Casañas y con una Seu repleta, los protagonistas de la actuación fueron la Orquestra Barroca de Mallorca, el Cor de la Generalitat Valenciana y los solistas María Espada (soprano), Carlos Mena (contratenor), Michel Terry (tenor) y Josep Miquel Ramon (bajo). El Collegium Vocale, el Cor de Mestres Cantaires, la Coral Universitat de les Illes Balears y el Orfeó UIB se encargaron de la masa coral, compuesta por más de 200 voces.
Tras tres meses y más de 50 horas de ensayos, los cantantes no profesionales tuvieron la oportunidad de interpretar una de las piezas navideñas más emblemáticas. Las directoras Montserrat Roset e Irina Capriles y las pianistas Yuko Mizutani, Antònia Gomis y Marta Ambrós realizaron el trabajo de preparación, que tuvo su punto álgido cuando se llegó a la mitad del concierto.