MARTA MEDRANO
El viernes por la noche se inauguró en el Museo de Pollença la exposición del XLIII certamen Internacional de Artes Plásticas que este año ha batido todos los récords de participación con un total de 254 dossiers presentados de artistas de más de treinta países.
Las nueve obras seleccionadas este año tienen como hilo conductor dos grandes temáticas: la violencia y el urbanismo. Una de las obras que llamó más la atención a los asistentes fue «So tell the girls I'm back in town», de Daniel Jordà. Se trata de una maqueta de una ciudad hecha con manteca de cerdo de diferentes densidades.
La serie fotográfica de Carlos Rodríguez Méndez, que captó imágenes de él compartiendo una cena con diferentes familias de Pollença también fue muy comentada, especialmente por el público local.
Junto a estas obras, destaca la pintura hiperrealista de Kepa Garraza, que representa una escena de violencia doméstica. La fotografía «Gloria», de Carles Congost, también se basa en un suceso. Otros artistas seleccionados son Carolina Silva, Camila Sposati, Antonio Ballester Moreno o las diferentes videocreaciones de Patricia Esquivia y Jorge Satorre.