EFE/R.C.
El escultor Miguel Ortiz Berrocal falleció ayer a los 73 años en su localidad natal, Villanueva de Algaidas (Málaga), a causa de un cáncer de próstata. Berrocal fue el diseñador de las estatuillas de los Premios Goya de la Academia de Cine, y se interesó desde su juventud por un sistema de escultura desmontable, transformable y combinatorio que caracteriza su producción escultórica. Ejemplo de ella es la pieza «Alfa e Romeo», una de las obras del artista que se encuentra en la Isla.
Escultores como Oteiza y Chillida han influido en la obra de Berrocal, que recurría a temas clásicos como torsos para evitar un resultado excesivamente geométrico y abstracto. Sin embargo, es evidente la impregnación de las matemáticas o la arquitectura en su obra, fruto de su formación académica.
Esa dificultad que comporta la realización de cada una de sus esculturas le impulsó, a partir de 1962, a realizar las mismas de manera seriada. A partir de 1974 su estilo se depuró extraordinariamente y en su etapa más reciente se sirvió de un dibujo cada vez más elemental y esencial. Desde que en 1952 celebrara en la galería Xagra de Madrid su primera individual, realizó exposiciones por todo el mundo y su obra se encuentra en importantes museos e instituciones europeas y americanas.