Hace casi diez años que Rosana Arbelo aparecía en el mundo discográfico con la contundencia que supuso el éxito de «Lunas Rotas». Ahora estrena compañía y dice «apelar más a los valores» en su quinto trabajo, «Magia», un disco que presentará en directo los próximos 24 y 25 de febrero en el Auditòrium. Rosana define este álbum como «un disco más rockero, no sólo por un sonido más basado en las guitarras eléctricas, sino porque la temática, siempre optimista, se centra más en las emociones, apela más a los valores y menos al sentimiento de amor entre personas». Es, de alguna manera, un trabajo más maduro y crítico, «una aportación con muchas intenciones, pero sin ninguna pretensión».
La cantautora canaria asegura, ilusionada, que el cambio de Universal a DRO es «como empezar de nuevo», «un salto cualitativo que se gestó como una necesidad de, sobre todo, trabajar en equipo». De este modo, su anterior álbum, «Marca registrada», un doble CD grabado en directo, supuso más que una transición. Rosana afirma que, entonces, su inminente marcha de Universal hizo que «la discográfica pusiera menos ganas en el proyecto y eso lo pagó el disco, aunque tiene grandes canciones que con el tiempo espero sean reconocidas».
En esta nueva etapa, Rosana dice haber encontrado «la calma necesaria para poder escribir y disfrutar de los conciertos». No en vano, la gira de «Magia» está siendo «muy tierna», «ni si quiera con aquel primer tour de 'Lunas rotas' se creó la magia que estamos viviendo en la presentación de este disco». Sobre el concierto que ofrecerá la semana que viene en Palma, adelantó que estará muy centrado en «Magia», aunque incluirá siete temas de sus cuatro anteriores discos. Afirma haber quitado canciones tan conocidas como «Si tú no estás» y haberse dado cuenta de que nadie las echa de menos, circunstancia que según Rosana responde a que «las canciones de 'Magia' han calado muy hondo en el público».