Joan Bibiloni afirma que en el mundo de las bandas sonoras aún le queda mucho por hacer. Ha compuesto mucha música para televisión y para documentales y, por el momento, ha vestido las películas «Km. 0» y «Vivancos 3». La IX Mostra de Cinema i Video le homenajea hoy en el Teatre Municipal por su dedicación al mundo audiovisual.
-¿Contento por el homenaje?
-Sí, agradezco la distinción, sobre todo que hayan pensado que el
trabajo que he realizado merece ser reconocido. Siempre está bien
tener sentido de la autocrítica, pero también está bien que
reconozcan lo que haces, que te den alas para seguir volando.
-Usted ha compuesto la banda sonora de «Km. 0» y
«Vivancos 3» y, también, ha ideado los temas de numerosos
documentales y series de televisión. ¿Cuál es su sistema de
trabajo?
-La manera de trabajar para audiovisuales, es decir, para proyectos
encargados, se basa en un equipo con un director. Existe una gran
ventaja: Hay mil músicas para una imagen y mil imágenes para una
música. Generalmente, el resultado coincide con la exigencia, es
una cuestión de oficio, de gusto y de vocación. Hacer una banda
sonora es muy gratificante y, a veces, más difícil que hacer una
canción porque estás haciendo lo mismo que un sastre, un traje a
medida.
-¿Cómo recuerda su participación en «Km.
0»?
-Entrañable. Buenos amigos, un buen equipo. Muy divertida. Me
planteé la banda sonora como si fuera un ambientador musical. Como
se trataba de una comedia, daba bastante de sí tratar diferentes
estilos de música. Salió.
-¿Repetiría experiencia?
-Sí. Creo que mi banda sonora todavía está por hacer, sin
menospreciar lo que he hecho hasta el momento. Me gustaría
encontrar una buena película porque el cine me gusta mucho. Pero,
por el carácter que tengo, no me dedico a ir de director en
director a ofrecerme como compositor. Me dejo llevar por la
casualidad.
-¿Qué supone la banda sonora para una
película?
-Si está metida dentro de la película, es una compañera de viaje.
Otros piensan, sin embargo, que no es necesario. Creo que si está
bien, no debe notarse, pero también hay bandas sonoras que se
recuerdan más que el propio film. Hay de todo. Considero que la
música nunca debe quitar protagonismo a la historia, aparte de que
explícitamente deba realizar esta tarea en un momento determinado.
Cada momento tiene su propia historia, su banda sonora.
-Entonces, nunca podrá ser un personaje más de la
historia.
-Un personaje más no, pero puede potenciar o deshacer una
cinta.
-Como cinéfilo, ¿cómo ve el panorama cinematográfico
actual?
-Soy usuario de las cosas que se hacen para comunicar algo. Tal vez
hay un exceso de oferta y, también, que es necesaria una visión más
europea del cine. Estamos invadidos por el cine estadounidense.
Sobra tanta opulencia y tantos medios, con pocos elementos pueden
decirse muchas cosas. El mensaje está demasiado influenciado por
las ventas y el marketing, no siempre una influencia favorable,
algo que también sucede en la música.