Un joven Erwin Bechtold, que ayer celebró su 80 cumpleaños inaugurando una exposición de su obra en Es Baluard, demostró su vitalidad creadora y humana sorprendiendo al público con la performance «Destrucció/costrucció».
Fue en el Aljub, donde, tras la presentación del artista a cargo de Marie Claire-Uberquoi, directora del museo, las luces oscurecieron la arquitectura de la sala. Al fondo, una enorme pared negra. Detrás de ella sale el artista enfundado en su mono de trabajo, como si estuviera en la intimidad de su estudio, 'armado' con un largo palo blanco a modo de brocha. Y con una 'facilidad' conseguida con años y años de trabajo que impactó a todos los asistentes, dibujó sobre ella, en vertical y con una ligera inclinación, en color blanco, una figura rectangular, un elemento que es leiv motiv en su obra.
De fondo suena la música compuesta expresamente por Josep Maria Mestres Quadreny. De pronto aparecen dos operarios, se suben a un andamio móvil y comienzan a agujerear el interior del rectángulo. La banda sonora, que había entrado en escena a petición del pintor, se entremezcla con los ruidos que producen los obreros, el monótono y molesto soniquete que producen las obras en una construcción. Cuando llegan al final, los focos que les iluminan se apagan, la sala se oscurece aún más y el trozo de pared 'destruida', el vacío que dejó la forma dibujada, se ilumina por detrás dando lugar a una nueva forma plástica.
Esa fue la historia sobre el proceso creativo que el artista quiso contar al público, muy numeroso, entre el que se encontraban Maria Antonia Munar, presidenta del CIM; Francesc Fiol y José María Rodríguez, consellers del Govern; Ramon Socias, delegado del Gobierno; Miquel Nadal, vicepresidente del CIM; los concejales de Cort Rogelio Araújo y María José Frau; Pere A. Serra, presidente de la Fundació Es Baluard; la cónsul de Alemania, Karin Köller; el senador Joan Fageda; los artistas Betty Gold, Ramon Canet, Damià Ramis, Miquel Vidal, Franco Monti, Amelia García, Hidalgo Nebot; el actor Simon Andreu; los comisarios de exposiciones Maria Llüisa Borrás y Albert Ribas; los galeristas Bernardo Rabassa, la ibicenca Caty Verdera y Joan Oliver «Maneu», entre otros muchos.