A. BASSA
Para algunos era su primera experiencia teatral y se quedaron
helados con el espectáculo. Algunas sonrisas, algunas lágrimas,
expresiones de sorpresa, o admiración...Lo cierto es que diferentes
reacciones iban poco a poco apareciendo en los rostros de los más
pequeños así como transcurría la acción.
Todo este mundo de sensaciones se vivió en el transcurso de la representación de la obra «Iglu» enmarcada en la Fira de Teatre de Manacor y dedicada muy especialmente a un publico infantil de entre uno y cinco años. Fue todo un éxito. Fueron muchos los que se quedaron sin poder ver el espectáculo que lleno la Sala de Dalt del Teatre municipal.
Se levantó el telón y empezó la acción. Las palabras sobran, los gestos son lo más importante. En la escena se desarrolla una historia visual que acoge las diferentes disciplinas artísticas, desde marionetas, actores, bailes...El objetivo es iniciar a los más pequeños de la casa en el mundo del teatro. «Se busca situar a los niños en un mundo nuevo y intentar que se acostumbren a ese mundo», explicó Ramon Moreno.