TOLO LLABRÉS
La actriz mallorquina Llum Barrera, que acaba de debutar en el cine con la película «Princesas», una de las preseleccionadas para representar a España en los Oscar, estrena el próximo día 24 en Alcúdia la obra de teatro «Angel», una tragicomedia dirigida por Jaime Pujol y que interpreta junto al actor Nacho Fresneda, ella en mallorquín y él en valenciano.
-¿Qué veremos en «Àngel»?
-Es una historia de amor preciosa, muy al límite, pero muy bonita.
El texto produce mucha empatía con el espectador. Es la historia de
una mujer acomplejada por los insultos que recibe en el colegio,
que si está gorda, fea. Llama a un gigoló para asistir a una cena
de antiguos alumnos para chulear mostrando al hombre con el que
supuestamente se ha casado. La obra tiene un desenlace trágico, con
efecto 2000 incluido. Se trata de una tragicomedia con mucho ritmo,
muy completa, trepidante.
-El pasado sábado hubo preestreno en Valencia. ¿Qué tal
fue?
-Apoteósico. La gente abarrotaba la calle, muchos no pudieron
entrar. Dentro la gente tenía que estar de pie. La obra al público
le llegó mucho. Ya hemos pasado la prueba de interpretar delante de
más de 400 personas, hemos oído sus risas, sus llantos y eso nos da
una cierta tranquilidad para la actuación de Alcúdia.
-¿Habrá estreno a lo grande en Alcúdia? ¿Algún vip
invitado que se pueda anunciar?
-Todavía nos quedan por confirmar actores como Pilar Bardem. Los
que ya han anunciado que vendrán son Malena Alterio y Edu Gómez, de
«Aquí no hay quien viva»; Fátima Baeza, Àngel Pardo, Jordi Rebellón
y Diana Palazón, de «Hospital central»; Melanie Olivares, de
«Aída»; Mar Regueras, de la última película de Garci; Marina
Cordero, de «Princesas», entre muchos otros.
-En el último año ha pasado por el teatro, la
televisión, el cine y ahora con «Àngel» estrena la faceta de
productora, además de artista. ¿Es inquietud o solamente que la
cosa está muy mal?
-Es inquietud, porque con la producción no mejora la cosa, sino que
añade más problemas. Lo bueno es que si tú te metes a producir algo
descubres otra faceta de tu trabajo y no tienes que esperar la
llamada del productor. Evitas ese horroroso parón entre obra y
obra. Eso sí que te da inquieted y estrés.
-Primero «Princesas» y ahora Àngel. ¿A qué responde el
giro dramático de su carrera? ¿No quiere encasillarse en el
personaje de Llum Barrera?
-Ya hace tiempo que buscaba que se me viera más como actriz que
como a Llum Barrera cómica. Lo de «Princesas» fue casual, porque
Fernando me vio y creyó en mis posibilidades dramáticas, pero lo de
«Àngel» fue buscado porque quería interpretar un papel con matices
distintos, indagar en ese registro. Es apasionante darle vida al
personaje de «Àngel». Lo mejor de montarte como productora es que
puedes darte tu personaje bombón, aunque no por eso voy a dejar de
hacer personajes cómicos.
-«Princesas» ha pasado el primer corte para participar
en los Oscar de Hollywood. ¿Ya tiene elegido modelito por si
acaso?
-Claro. Siempre, siempre un modelito de Tolo Crespí, luciendo las
cosas de mis amigos y llevándolas por doquier. A ver si nos aceptan
esta película en Hollywood como candidata al Oscar a la mejor
película de habla no inglesa sin clasificarla X. Pienso que el
trabajo de Candela y de Micaela es espectacular y que no tiene nada
que envidiar al trabajo de muchas actrices destar system.
-¿Se ha sentido a gusto en su personaje de
«Princesas»?
-El papel tiene su punto irónico, no es la payasada que me suelen
pedir. La tía se tenía que entender con las putas. Me sorprendí al
ver el gesto de maruja que me ha sacado Fernando León.