Joan Punyet, nieto y heredero de Joan Miró, contestó ayer a las preguntas que le formuló este diario sobre su malestar por los vestidos diseñados por la modista Àgatha Ruiz de la Prada a partir de obras mironianas. La modista sabía que la Successió Miró, titular de los derechos de imagen y de autor, se oponía a su proyecto. Sin embargo, lo realizó, y el exdirector del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM), Kosme de Barañano, autorizó la impresión de un catálogo con los vestidos. La Successió Miró pidió la semana pasada al IVAM que retirara de inmediato estos catálogos.
-Qué le parece la reacción de Ruiz De la Prada a raíz de
las acusaciones formuladas por la Successió Miró, al intentar
justificarse con una supuesta autorización, o encargo, del
exdirector de la Fundació Miró, Aurelio Torrente, para confeccionar
estos vestidos.
-Creo que no es una reacción demasiado elegante. El pasado mes de
mayo, nosotros le advertimos por carta certificada que queríamos
que retirara inmediatamente todas las deformaciones de la obra
mironiana aplicadas a sus trajes, y nunca recibimos una respuesta.
Eso nos hizo pensar que había tergiversado la realidad, porque
nosotros lo tenemos todo escrito: toda la documentación verifica,
explica y subraya que no ha existido ninguna confusión, y por lo
tanto no puede haber ninguna polémica por nuestra parte. Tal vez
por parte de la señora Ruiz ha existido una intención de deformar
la realidad.
-¿Están dolidos?
-Nos ha hecho mucho daño, y por eso pedimos por escrito, hace una
semana, la retirada del catálogo del IVAM. Consideramos que salen
copias burdas y extremadamente peligrosas, porque trivializan de
manera explícita la obra de Joan Miró, y eso no puede permitirse ni
a ella ni a nadie.
-¿Qué más piensan hacer?
-Tenemos consensuada, para el mes de septiembre, una reunión con la
directora del IVAM, Consuelo Ciscar, porque nos queremos sentar con
la señora Ruiz de la Prada y con el señor Kosme de Barañano para
tratar este tema y poner punto y final a esta tergiversación de la
realidad que nosotros no podemos aceptar ni aceptaremos nunca de
ninguna de las maneras. Eso va muy más allá de la familia Miró o de
la Successió Miró. Está tocando un artista universal de la altura
de Joan Miró. Nosotros tenemos la obligación moral de no permitir
que siga adelante.
-Una solución pasa por la retirada del
catálogo.
-Eso se ha hecho tácitamente hace una semana, y se ha exigido por
escrito la retirada inmediata del catálogo de la señora Ruiz de la
Prada publicado por el IVAM.
-En esta polémica, a ustedes se les intenta hacer de
menos, al estilo de que «están mal aconsejados» o «a quién tienen
detrás es a Pere Serra». ¿No piensan que hay un ánimo ofensivo
reiterado?
-Mi visión personal de esta polémica es que no hay polémica, sino
una tendencia a deformar la realidad. Y esto es una lástima, porque
nosotros hemos actuado siempre con buena voluntad, somos una
Succesió consciente de que todo tiene que hacerse por escrito, con
certificado de recibo y correo por buro-fax. Todo debe
documentarse. Y repito, no hay ninguna polémica por nuestra parte,
todo es demostrable, porque tenemos toda la documentación. E
insisto, nos duele esta tergiversación por parte de la señora Ruiz
de la Prada. En cualquier momento podemos sacar los documentos que
lo testifican.
-¿Cree que la señora Ruiz de la Prada, ya sea como
diseñadora o artista, como a veces se presenta, tiene consciencia
de que ha incurrido en unos hechos que son
lamentables?
-Eso debería preguntárselo a ella. Tenemos la documentación que
puede probar que se ha excedido y no está actuando de una manera
respetuosa y legal hacia el nombre de Joan Miró.
-En todo caso no les habría pedido autorización, sino la
hubiera necesitado.
-En el año 2000 nos hizo una petición para hacer esta exposición y
nosotros, el mismo año y en una carta firmada por mi madre, mi
hermano Emili y yo mismo, le denegamos la autorización. Se lo
repetimos constantemente porque no queríamos que se hiciera. Ha
querido apoderarse de un patrimonio cultural que no le pertenece
porque es propiedad de la Succesió Miró.
-El señor Kosme de Barañano afirma que no tenía
constancia de la negativa de la familia Miró. A mí me parece que a
la fuerza debería de tenerla.
-La única constancia que hubiera podido tener el señor De Barañano
es la que le hubiera hecho llegar la señora Ruiz de la Prada. Una
de dos: o la señora Ruiz de la Prada le escondió la negativa que
nosotros le hicimos llegar por correo certificado, o es que
simplemente era consciente de que existía la negativa y se permitió
el lujo de publicar un catálogo sin nuestro consenso.
-En un artículo de opinión publicado en el diario «El
Mundo», el señor Kosme de Barañano hacía una justificación
intelectual de los diseños de Ruiz de la Prada, en el sentido de
que la historia del arte está llena de copias de los grandes
artistas.
-El señor Kosme de Barañano está intentando defender, con una serie
de teorías históricas, la apropiación indebida de una obra
artística por una diseñadora de moda. Y la señora Ruiz de la Prada
nunca se puede amparar en las defensas del señor De Barañano porque
ella sabe perfectamente que está actuando de una manera
«parasitista», es decir, que se apropia de un patrimonio que no le
pertenece. Y Kosme de Barañano hizo una explicación desde mi punto
de vista historicista y barroca, pero que intentaba salir por la
targente del problema y desviarse del fondo de la cuestión, que es
el derecho sobre la propiedad intelectual de la obra de Joan Miró,
que la señora Ruiz de la Prada ha utilizado de una manera ilegal
que nosotros no podemos permitir.