Los herederos de Joan Miró se han enfrentado a la modista Agatha Ruiz de la Prada por considerar que está defraudando los derechos de propiedad intelectual del artista. Según ha podido saber este diario, la familia le ha notificado que ha hecho un uso indebido y fraudulento de la obra mironiana en la ropa que aparece en el catálogo editado por el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) a finales de 2004.
Según la familia del pintor, la compañera sentimental de Pedro J. Ramírez ha actuado con menosprecio hacia el artista y se ha apropiado indebidamente de su legado, lo que no ha justificado ante los herederos.
Los responsables de la gestión de los derechos de propiedad intelectual y de imagen del artista se han dirigido a la modista para manifestarle su descontento, sin que hayan recibido algún tipo de respuesta.
Emili Fernández Miró y Joan Punyet Miró han recordado a la presunta defraudadora que había obrado en contra de la prohibición expresa de la familia Miró, que se había opuesto de manera frontal a su proyecto inicial de hacer una colección de ropa sobre la obra del artista. Los herederos han constatado que en el citado catálogo aparecen una veintena de trajes que aluden directamente a obras de Joan Miró, que reproducen fragmentos y/o que utilizan grafismos del pintor. Eso sí, Agatha Ruiz de la Prada ha evitado escrupulosamente mostrar los originales en los que se «inspiró», a pesar de que la referencia resulta evidente a cualquier conocedor de la obra mironiana.
La excusa para la utilización de legado de Joan Miró es un pretendido homenaje de Ruiz de la Prada al autor de las «Constelaciones». Según los herederos, el homenaje esconde un aprovechamiento ilícito de la creación artística de Miró que vulnera los derechos de autor, de lo que tendría que estar enterada Agatha Ruiz al presentarse ella misma como artista.