Patrimoni Històric ha suspendido cautelarmente la ejecución de unas obras en la calle Llorenç Villalonga de sa Calatrava hasta que la promotora presente el proyecto de intervención arqueológica, según informó el director insular de Patrimoni, Joan Mas. Los trabajos fueron denunciados por la Asociación de Vecinos de dicho barrio y la orden se hizo efectiva ayer después de una inspección de los técnicos del Consell. Las obras consisten en la construcción de una nueva promoción inmobiliaria. Comenzaron hace dos semanas y dada su ubicación, a cien metros del polémico Bastió den Berard, se considera que el solar puede ocultar una gran riqueza patrimonial.
De momento, según la inspección, «no se ha provocado ningún daño». Tesis que los vecinos contradicen, asegurando que se ha visto afectado un tramo de la muralla medieval que atraviesa el solar. Desde el Colegio de Arqueólogos, su presidente, Ferran Tarongí, ha manifestado su malestar por esta nueva irregularidad sobre la que añadió que el arqueólogo que lleva a cabo el seguimiento de las obras no está colegiado. De esta manera, según dijo, su control arqueológico no tiene validez.
Los vecinos explicaron que el arqueólogo en cuestión estaba siendo supervisado por la arqueóloga municipal, Magdalena Riera, quien aseguró que «la muralla no se ha visto dañada, simplemente se han retirado unos ladrillos que tenía adosados».