El Auditòrium fue ayer el escenario más reivindicativo. Con un lleno casi total, músicos e intérpretes cedieron su voz para entonar un único canto: «Salvem La Real». Carumbau, Al-Mayurqa, Marta Elka, Antònia Font, Damià Timoner, Miquela Lladó, Maria del Mar Bonet y Lluís Llach protagonizaron, junto a los presentadores Carles Rebassa, Pepa López y Rossy de Palma, una noche contra la construcción del hospital en Son Espases, en el entorno de La Real que se cerró con el canto de «La Balanguera»
El público respondió masivamente y hubo rostros de la izquierda política como el delegado del Gobierno Ramon Socías, Francesc Antich, Celestí Alomar, Francina Armengol, Antoni Roig, Santi Morey y Joaquin Bellón del PSOE; Eberhard Grosske (EU); Pere Muñoz, Pere Sampol y Barbara Bujosa del PSM; Margalida Rosselló (Els Verds); el ex presidente del GOB Miquel Àngel March y los escritores Miquel Àngel Lladó y Antoni Maria Thomàs. Tras la lectura de unos versos del «Amic Amat» de Ramon Llull por la actriz Pepa López, Assumpció Renom, portavoz de la plataforma «Salvem La Real», explicó que «no somos anti hospital, estamos a favor de la cultura y la protección de un bien histórico». Para Renom, «el progreso digno de un pueblo como el nuestro es no renunciar a sus valores». «Confiamos en la Justicia», pero nos «vemos obligados a alzar la voz contra las instituciones». Tras estas palabras, muy aplaudidas, comenzó la música de Carumbau, que interpretó el «Parado de Valldemossa». Para el poeta Carles Rebassa «somos un pueblo más festivo que combativo» y Antoni Roig, de Al Mayurqa, dijo que «un pueblo culto crece mirando al pasado y uno inculto, comiendo el futuro». Una crítica Rossy de Palma citó a Antonio Vallespir, prior de La Real: «Tenemos que defendernos de los políticos cuando ellos tendrían que defendernos a nosotros» en una tierra convertida en «un queso gruyere».