Carmen Calvo, ministra de Cultura, que mañana inaugurará la Biblioteca Pública del Estado de Can Salas, ofrecerá esta tarde en Pueblo Espanyol una conferencia coloquio ante representantes del mundo cultural local. Calvo llegará a Palma precedida por la polémica. La reunión de hoy, prevista inicialmente en el monasterio de La Real, fue cambiada de ubicación por divergencias con el Govern ya que por Palma corrió el rumor de que Calvo se reuniría durante la misma con la plataforma Salvem la Real, asunto que fue considerado por el Ejecutivo balear como un acto de «hostilidad» e incluso se llegó a comentar que Jaume Matas, president del Govern, no acompañaría a Calvo en la inauguración de Can Salas.
La aguas volvieron a su cauce tras conversaciones telefónicas de urgencia entre Palma y Madrid. Un portavoz de Matas señaló ayer que el president acudiría a la inauguración y que «en unas declaraciones a una cadena de radio dijo que la biblioteca es lo primero». Por su parte, el PSOE dijo mediante otro portavoz que la reunión siempre había tenido como fin «poner a la ministra en contacto con la sociedad cultural balear y no con Salvem la Real». El traslado al Pueblo Espanyol se hizo «en pro de las buenas relaciones institucionales y para no dar una excusa que pueda servir al Govern balear para abrir una nueva línea de confrontación con Madrid».
Previamente a la citada reunión, Calvo y Matas se entrevistarán en el Consolat en compañía de Francesc Fiol, conseller de Cultura. Durante el recorrido que Calvo y Matas harán mañana por la biblioteca, los responsables del centro mostrarán a la ministra una selección de sus libros de fondo antiguo como manuscritos de las obras de Ramon Llull; de fray Junípero Serra; un incunable de Dionisio el Cartujano; cantorales iluminados, un ejemplar de «El Quijote» de 1872 y otro «Quijote» con una introducción de Miquel dels Sants Oliver.