LYDIA E. LARREY
El mundo de la danza -representado por Miguel Ramón, director de Sa Nau y coordinador de Danza Calvià; Marga Llobera, directora de Absolut cia., y Aina Compte, coordinadora de 58 Bous- presentó ayer un manifiesto de intenciones en el que a lo largo de nueve puntos exponen las medidas a tomar para situar esta disciplina en el lugar que se merece.
En esta proclama, se insta a las instituciones a fomentar las escuelas municipales y crear vínculos con el Conservatori, independizar el departamento de Danza del Conservatori del departamento de Música, la creación de partidas presupuestarias específicas (en forma de ayudas, becas y subvenciones), establecer un circuito propio de danza con programas para teatros y fomento de la danza para niños, la formación de una compañía profesional de danza, la creación de un centro coreográfico para promover la formación específica y la constitución de una asociación balear de danza que aglutine a escuelas y formaciones que componen el mundo del baile en las Islas con el fin de aunar esfuerzos de cara a defender sus posiciones.
El texto ha surgido tras la IV Edición de Danza de Calvià, celebrada en mayo de 2004, durante la cual se realizó una mesa de trabajo abierta bajo el lema «Actualidad de la danza balear», reuniendo a representantes de instituciones locales, coreógrafos y directores artísticos. Como señala Miguel Ramón, «con ello no pretendemos llorar pidiendo dinero a las instituciones, son unos puntos que se presentan a la administración para poner a la danza donde le corresponde, y no desde la perspectiva de la danza contemporánea, sino de todas las disciplinas, desde clásico a folklore, pasando por flamenco».
Aina Compte aprovechó para presentar 58 Bous, entidad con la que se pretende fomentar montajes de pequeño formato, y otras actividades, en la recién inaugurada Sala Margarita de s'Aixoplug, local de la calle del Pes de sa Farina que albergará el trabajo de artistas los jueves.