El periódico «Los Angeles Times» presentó mediante un reportaje la interrelación entre Joan Miró y Alexander Calder. La noticia, que incluía referencias a Palma, toma como punto de partida la exposición «Calder-Miró» que desde el pasado octubre se exhibe en la Phillips Collection de Washington.
El texto empieza destacando la amistad que existía entre los dos artistas, que quedó patente en numerosas postales y cartas. «Hay fuertes semejanzas entre Calder y Miró. Los dos tenían una calidad endiablada, un sentido del juego, un gran amor por la aventura y una gran afición por crear esferas y biomorfos muy coloridos. Pero ellos nunca intentaron imitarse. No quisieron competir», explica el artículo.
Mallorca aparece en el apartado centrado en explicar la biografía de Miró. En él, el autor del reportaje, el periodista Stanley Meisler, cuenta uno de los grandes privilegios de su carrera: haber entrevistado a Miró en Palma. «El encuentro tuvo lugar en su casa y estudio de Palma el día en el que Miró cumplía 85 años. Otro corresponsal y yo pasamos largas horas con él ese día de 1978, dejándonos impresionar por su energía, buenos sentimientos y su tímida sonrisa». La Isla vuelve a protagonizar el texto más adelante, cuando el artículo explica el traslado de Miró a Mallorca.
El texto termina afirmando que tanto Calder como Miró eran «dos artistas maravillosos». «Unir el trabajo de estos grandes amigos es algo excepcional que convierte la exposición en algo excepcional».