El Consejo Nacional de Patrimonio Histórico, órgano de coordinación entre el Ministerio de Cultura y las Comunidades Autónomas, mantiene desde el jueves una reunión en Palma cuyo «tema estructural prioritario» ha sido el 1 por ciento cultural, aspecto sobre el que se ha aprobado de forma unánime la reorientación de su política de inversión.
El director general de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Cultura, Julián Martínez, explicó ayer que entre los criterios primordiales consensuados destaca «la finalidad de que los inmuebles sobre los que se vaya invertir el 1 por ciento estén declarados Bien de Interés Cultural (BIC) o estén protegidos por las propias legislaciones autonómicas».
La medida del 1 por ciento cultural, recordó, establece que en el presupuesto de cada obra pública se incluirá una partida equivalente a este porcentaje de los fondos que sean de aportación estatal para financiar trabajos de conservación. El acuerdo alcanzado por el Consejo de Patrimonio será elevado a la Conferencia Sectorial de Cultura, formada por los consejeros y consejeras de Cultura de todas las Comunidades Autónomas, Ceuta y Melilla, y presidida por la ministra de Cultura, Carmen Calvo, para su aprobación y posterior remisión a la Comisión Interministerial para la Coordinación del 1 por ciento cultural. Asimismo, afirmó que en la reunión se ha debatido también sobre un programa de cooperación cultural entre comunidades autónomas y se ha presentado una ficha catalográfica para «homologar e informatizar todos los bienes muebles de titularidad eclesiástica».En otra línea de actuación, el Consejo del Patrimonio Histórico ha acordado presentar ante la UNESCO tres candidaturas a Patrimonio de la Humanidad: la ampliación de la obra arquitectónica de Gaudí -solicitud en la que Balears participa como parte integrante-, los yacimientos de Icnitas de dinosaurios de la Península Ibérica y el puente colgante de Portugalete (Vizcaya). También se ha anunciado que ya se han entregado ante la UNESCO las dos candidaturas españolas que se han presentado como Obras Maestras del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad. Estas dos candidaturas son el flamenco y la música andalusí como candidatura multinacional y la Patum de Berga como candidatura nacional.