EFE|ESTOCOLMO
La austríaca Elfriede Jelinek es la ganadora del Premio Nobel de Literatura 2004, comunicó ayer la Academia sueca, en reconocimiento al juego de «voces y contravoces» de sus novelas y el «extraordinario entusiasmo estilístico que revela el absurdo de los clichés en la sociedad».
La escritora, que se convierte en la décima mujer que recibe el Nobel de Literatura, es un exponente de escritura rebelde con la hipocresía social y, especialmente, con la de su país de origen, Austria, contra la que ha arremetido sin tapujos tanto en sus novelas como en piezas de teatro.
Nacida en 1946, en la localidad austríaca de Mürzzuschlag y con raíces checo-judías, empezó en el ámbito de la lírica en 1967 con la colección de poemas «Las sombras de Lisa». Su obra más conocida es «La pianista» (1983), de contenido claramente autobiográfico e inspiradora de la película del mismo título de Michael Haneke.
Junto a la poesía, la novela y el teatro, Jelinek ha entrado asimismo en el terreno cinematográfico y radiofónico, así como la traducción al alemán de autores estadounidenses.
Hasta ahora, en la lista del Nobel de Literatura había nueve ganadoras: la sueca Selma Lagrloef, en 1909; la italiana Grazia Deledda, en 1926; la noruega Sigrid Undset, en 1928; la estadounidense Pearl S. Buck, en 1938; la chilena Gabriela Mistral, en 1945; la alemana Nelly Sachs, en 1966; la sudafricana Nadine Gordimer, en 1991; la estadounidense Toni Morrison, en 1993; y la polaca Wislawa Szymborska, en 1996.
El premio está dotado con 1,1 millones de euros y se entrega el próximo 10 de diciembre, aniversario de la muerte de Alfred Nobel.