La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Balears recibió ayer una denuncia que pretende poner sobre aviso de la posible comisión de un delito patrimonial en la excavación arqueológica de Antoni Maura. La notificación, firmada por Sofía Alomar y la arqueóloga Helena Inglada, expresa que «con fecha 23/09/04, el consejo de administración de la Societat Municipal d'Aparcaments (SMAP) adjudica la construcción del aparcamiento subterráneo de la calle Antoni Maura sin que todavía se haya tomado una decisión ni concluyente ni definitiva sobre el futuro de los hallazgos arqueológicos localizados».
En su escrito, las denunciantes explican que «el conjunto histórico de Palma está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), máxima protección patrimonial recogida en la legislación vigente, y la Avenida Antoni Maura forma parte de dicho conjunto». En este sentido, aclaran que «varios de los restos hallados son per se BIC» y agregan que «puesto que no se ha concluido la excavación, no se puede hacer una valoración de los restos».
En un comunicado remitido junto a la denuncia, Helena Inglada expresa que «los reiterados proyectos de aparcamientos subterráneos de Cort en el casco antiguo demuestran el desprecio de las autoridades por el valiosísimo patrimonio histórico de la ciudad». Añade que «a pesar de tener conocimiento de que los lugares propuestos contienen valiosos restos de la ciudad antigua, el Ajuntament desoye y viola las leyes que le obligan a mantener y cuidar el patrimonio del cual es gestor, cuando su deber es salvaguardar los valores del pueblo que custodia».