OLGA QUINTANILLA|MADRID
El Círculo de Bellas Artes de Madrid inaugura hoy la exposición «Picasso. Cerámicas», compuesta por 52 piezas pertenecientes a la Col·lecció d'Art Serra y a los fondos no expuestos del Museu Es Baluard. En la muestra, que permanecerá hasta el 12 de septiembre, están representadas todas las épocas, todas las formas y toda la temática picasiana. El director de Artes Plásticas del Círculo de Bellas Artes, José Luis Canedo destacó la importancia de esta colección en la que «se muestra la parte más humilde pero igual de significativa del artista. Para entender la obra globalmente hay que detener la mirada en esta producción de Pere A. Serra que no se ha podido visitar nunca de esta manera». Por su parte, la comisaria de la muestra, Dolores Durán declaró que «estamos ante la colección más importante de cerámicas de Picasso que existe en Europa con independencia de los fondos de la familia. Merece la pena visitarla».
Según explicó Durán, Picasso se inició en la cerámica tardíamente, con 65 años, lo que «favoreció el cambio de su técnica y el proceso creativo dando lugar a unas aportaciones nuevas tanto en lo creativo como en lo formal en la obra de Picasso». En esta exposición podrán contemplarse obras que abarcan desde 1949 hasta 1971 cuya temática se desliza entre la mitología de los centauros, los toros, las aves, los búhos, la paloma de la paz y por supuesto, no podían faltar los rostros de mujer.
«Lo más destacable de la colección es que permite observar con detenimiento el genio artístico de Picasso que se dota de una nueva técnica formal, lo que hace de su obra escultórica algo realmente enriquecedor», en palabras de Durán. Picasso realizó durante su vida más de 4.000 cerámicas repartidas entre España, el Museo Picasso de París y los fondos familiares del artista que, según la comisaria de la muestra, han permanecido en la sombra hasta hace poco. Las piezas son fuentes, jarras, vasias o azulejos, entre otros.