El artista Sean Scully expondrá dentro de dos años una serie de obras nuevas en Mallorca. Así lo explicó ayer después de una visita realizada por la mañana al Museu Es Baluard, donde se exhibe una de sus piezas, «Mérida», una obra formada por una colección de 16 fotografías a color, que forma parte de los fondos del centro. Scully afirma que le gusta planificar con tiempo sus exposiciones. «Para mí, la pintura es una forma de arte que necesita mucho tiempo para evolucionar, porque supone la relación de la vida intelectual con la emocional. Esta combinación es difícil de relacionar con poco tiempo, por eso sé que no expondré en Mallorca hasta dentro de dos años».
El pintor permanecerá en la Isla hasta mañana, puesto que el lunes tiene que reincorporarse a las clases que da estos días en Munich. «Tengo 35 alumnos, a los que enseño a interpretar la pintura. No todos son pintores, aunque sí la mayoría», comentó. «Es un espacio muy poético, sobre todo por las vistas a la Catedral y a la muralla». Así definió Scully el Museo Es Baluard. «Me encanta la coordinación entre lo antiguo y lo contemporáneo. Ha quedado un museo muy bello. Infraestructuras como éstas sólo pueden darse en Europa, en los Estados Unidos es muy diferente. Lo que me fascina de este museo es la correspondencia entre los diferentes niveles y su arquitectura, en la que puede verse una evolución entre un pasado fuerte y cargado de historia y un futuro posible. Las vistas a la Catedral son fantásticas».
Scully también habló sobre la colección que se expone en el museo y asegura que «hay algunas paredes que me molestan para poder observar las obras con perspectiva. No obstante, en los espacios más amplios la observación de las obras es bastante mejor. Lo que me gusta es que tiene una muy buena altura, pero creo que hay una excesiva cantidad de obras expuestas. Aún así, hay algunas piezas muy buenas».