Pasaban apenas unos minutos de las nueve y media de la mañana de ayer cuando lo que hasta entonces sólo era una sospecha cobraba forma. Oculto bajo una fina capa de asfalto en la Porta Roja de Alcúdia, los técnicos municipales, acompañados por un arqueólogo del área de Patrimoni del Consell de Mallorca, hallaban el tercero de los puentes de la muralla de Alcúdia construido en marés, probablemente en la primera mitad del siglo XIX, y que no había sido visto en el último siglo. Un equipo de arquitectos de Alcúdia, encabezado por Gloria Druguet y su esposo Antoni Domingo, estudiaban el recinto amurallado cuando hallaron en la descripción que del municipio realiza el archiduque Lluís Salvador en su libro «Die Balearen» el siguiente texto: «La Porta de la Vila Roja en lengua común Porta Roja es sencilla y sin adornos. Muestra todavía las huellas de los mecanismos otrora dispuestos para levar el viejo puente que salvara el foso, en la actualidad reemplazado por uno más moderno de dos ojos».
Los arquitectos sugirieron tras la lectura al alcalde Miquel Ferrer que aprovechara las obras de peatonalización del camí de Ronda a su paso por este tramo para realizar unas catas arqueológicas y comprobar así si el puente que describió el archiduque aún existía bajo la capa de asfalto, como finalmente así ha sucedido. El puente de la Porta Roja tiene 15 metros de largo por 4,30 de ancho y aunque aún no ha podido ser confirmado, se espera que casi 4 metros de profundidad. De confirmarse estas medidas éste sería el puente de mayor tamaño de los tres hallados en Alcúdia. Los puentes sirven para salvar el foso en los tres accesos originales a través de las murallas, por la Porta del Moll, la Porta de San Sebastià y la Porta Roja.
Como singularidad, los técnicos destacaron que el trazado de este puente es oblicuo al del foso cuando lo habitual es que sea perpendicular. Tanto los técnicos como los políticos presentes durante la cata (hasta allí se desplazó el director insular de Patrimoni, Joan Mas) coincidieron al señalar que el hallazgo dará una mayor relevancia a las murallas y que el proyecto de excavación deberá incluir, además del propio puente, el foso, desaparecido en este tramo, lo que otorgará una gran majestuosidad al bastión renacentista. El director insular de Patrimoni destacó la «profesionalidad del Ajuntament d'Alcúdia que desde el principio ha contado con el apoyo de nuestros técnicos y que como marca la ley no han comenzado las obras hasta contar con un arqueólogo». «Ahora lo que hay que hacer es presentar un proyecto y que sea la ponencia técnica del Consell de Mallorca la que valore cómo han de seguir las excavaciones», añadió Joan Mas. Durante toda la mañana, la Porta Roja vivió una actividad frenética. Una grúa fue la encargada de excavar el asfalto hasta que encontró el tercer puente. El director insular de Patrimoni destacó la buena conservación de este elemento que presenta, eso sí, una grieta de cinco centímetros de ancho por lo que se ha cerrado inmediatamente al tráfico rodado.