Miles de personas despidieron ayer al cantaor Juanito Valderrama, fallecido ayer en Sevilla, en la capilla ardiente instalada en la antigua iglesia de San Luis de Los Franceses, donde la afluencia de ciudadanos ha sido constante y ha obligado a cerrarla una hora antes de lo previsto. Entre los cientos de personas que desde primera hora de la mañana se agolpaban a las puertas de la iglesia para rendir un último homenaje al cantaor había políticos, como el presidente de la Junta, Manuel Chaves, famosos, como Juan Imedio, la duquesa de Alba o la esposa de Curro Romero, Carmen Tello, y compañeros de profesión, como Calixto Sánchez o Juan Peña «El Lebrijano».
Tanto su localidad natal, Torredelcampo (Jaén), como el pueblo de Espartinas (Sevilla), donde el cantaor residía desde hacía décadas, han decretado tres días de luto y el municipio sevillano lo ha nombrado además hijo predilecto a título póstumo.
El féretro con los restos mortales de Juan Valderrama Blanca, «Juanito Valderrama», salió a las 11.45 horas de su domicilio de Espartinas y llegó a una iglesia de San Luis ya abarrotada de público en sus inmediaciones a las 12.35 horas. Decenas de personas aplaudieron la llegada y posterior salida del féretro con los restos mortales del cantaor entre el dolor de la viuda, Dolores Abril, y su hijo, el también cantante Juan Valderrama.