Durante 25 años, Menéndez Rojas ha ido incorporando materia a sus obras. Primero le interesó la pintura plana. Después, el elemento táctil empezó a introducirse en sus cuadros hasta convertirse en «una cuestión ideológica». En «Magma», la exposición que esta noche se inaugura en el Centre de Cultura Contemporani Pelaires, intenta «poner orden en el caos» que existe en la actualidad a través del «dibujo».
En cada una de las obras sigue apareciendo la figura como «icono». «Soy como un apéndice de la tradición, donde la figura es un elemento de comunicación que nos une a todos los humanos». Fácil de identificar y de «reconocer», sirve «para que la gente nos entienda». Como resumen de la muestra, una escultura que «ilustra en tres dimensiones el concepto del caos» a través de «una espiral» compuesta por diferentes figuras que suben y bajan.
«No se trata de una exposición autobiográfica pero tiene elementos de mis últimos años de vida». El artista siempre intenta distanciarse de su vida a la hora de crear, pero sabe que es difícil porque siempre se parte de «la experiencia». «En una muestra se puede ver de dónde se viene y hacia dónde se va». Y, también, «tu propia historia, una historia que se refleja en los cuadros».