El Museu des Baluard incorporó ayer la obra «Fifteen holes» de Miquel Barceló, un cuadro procedente de la Col·lecció d'Art Serra que ocupará un lugar destacado dentro del conjunto de pinturas de los años 80 y del arte contemporáneo más actual del centro. Se trata de una pieza de 1987 realizada en técnica mixta sobre lienzo que mide 285x355 cms.
En «Fifteen holes», Barceló estudia las «espirales», una técnica que «inició con sus sopas», explicó Pilar Ribal, responsable del área artística de Es Baluard. De fondo, queda patente el homenaje del artista de Felanitx al expresionismo abstracto y, sobre todo, a la gestualidad de Pollock. Los relieves y las texturas del cuadro demuestran «un dinamismo de la materia» que se mezcla con sus orígenes mediterráneos a través de «las transparencias y la sutilidad» de la pieza que, a su vez, recuerdan «su época blanca».
La obra compartirá espacio con artistas como los alemanes Kieffer o Polke o los españoles Broto, Sicilia o Campano, entre otros artistas incluidos en la corriente transvanguardista. «Fifteen holes» no será el único Barceló del museo aunque sí será el más importante.