SIMO MATEU
Bajo el lema «El judaísmo y las arte» se celebró ayer, en la sede
de ARCA, la IV Jornada Europea de Cultura Judía. Palma no estuvo
sola, ya que una veintena de ciudades españolas celebraron la
jornada. A la sede de ARCA se acercaron alrededor de un centenar de
personas, un hecho que, fuentes de la organización, catalogaron de
«muy positivo». Entre los asistentes, el director insular de
Cultura, Josep Lliteres, y la regidora de Turismo de Cort,
Francisca Bennassar.
Los actos empezaron a las 18.00 horas con la posibilidad de ver una muestra de libros. Dicha exposición contaba con textos de literatura de autores judíos y de temática judía. Mientras los primeros únicamente eran de muestra, los segundo estaban a disposición del público para cualquier posible compra. A las 19.00 se inició la conferencia del experto Mario Saban, historiador y economista, que trató sobre la expulsión judía en España, con temas como su lugar de destino, cómo crearon la comunidad o el poco conocido asunto de la Inquisición y su actuación en América.
Saban comentó que «trabajando mucho y con la gran ayuda de Grandalia, que trabaja junto a la Universidad de Barcelona, se pueden rescatar las juderías en España». Tras la conferencia hubo degustación de cocina sefardí y vino casher. Finalmente los asistentes pudieron disfrutar de un concierto de la tradicional música klezmer. Tras esta actuación tuvo lugar la visualización de dos vídeos documentales, uno de ellos con un gran valor histórico ya que fue rodado en 1936, sobre la música klezmer.