MARIA PUIGRÒS
El arte y la música se dieron la mano por una buena causa. La cita
era en sa Capella de Santa Margalida. El motivo, recaudar fondos
para restaurar la iglesia de la localidad. Los protagonistas, más
de setenta artistas y el Quartet Vocal Sixters.
El público empezó a llegar al acto casi una hora antes de que empezara. La intriga por ver de primera mano las obras de los autores que, más tarde, se subastarían, era enorme. Mucho glamour y mucho calor fueron las notas dominantes de la velada. Una velada que transcurrió sin retrasos excesivos y que contó con la presencia de algunos de los artistas que quisieron participar en el proyecto como, por ejemplo, Horacio Sapere, Martí Monjo, Pere Ignasi y Vicenç Ochoa, entre otros muchos nombres.
El Quartet Vocal Sixters ofreció un repertorio centrado en canciones que todo el mundo pudo tatarear. Temas como «I'm gonna sing» o «Nobody knows» animaron el ambiente. En el intermedio se celebró la subasta. Los asistentes tenían claro qué querían comprar y, por ello, pujaron con fuerza. Se trataba de ayudar a una buena causa y, el motivo, valía la pena.