«Llenar Lluc de música». Este es el objetivo que se ha marcado la VI Trobada de Joves Violinistes de la Mediterrània que organiza el Col·lectiu el Meu Violí y que espera reunir unos 200 escolares de Balears, Catalunya, Valencia e, incluso, Alemania e Italia. La cita será el domingo 11 de mayo. Este año, el proyecto de Bernat Pomar presenta como novedad más destacada el desarrollo paralelo de una semana cultural dedicada a la pedagogía y creatividad de instrumentos de cuerda, a partir de conferencias y conciertos que se celebrarán a las 20.30 horas en la iglesia de Sant Felip Neri. Este programa culminará con la Trobada, el domingo. En ella, grupos de estudiantes se distribuirán por todo el monasterio para llenar de música los rincones de Lluc.
Acompañado por el presidente del colectivo promotor, el conseller de Cultura, Damià Pons, presentó ayer los actos haciendo una reflexión: «Si las instituciones y los baleares están interesados en que la música gane en calidad, es fundamental fomentar la existencia de una masa que contribuya a enraizar la música en nuestra sociedad». En este sentido, el conseller de Cultura alabó «la emotividad, el esfuerzo y la dedicación» del colectivo El Meu Violí.
Agradeciendo la ayuda que el Govern rinde a su proyecto, Bernat Pomar destacó que el programa se abrirá el lunes, 5 de mayo, con el homenaje que la Trobada quiere rendir en esta edición al cofundador del Conservatori Regional de Música de Balears, Jaume Roig. Su nieto, Joan Roig, actual director del Conservatori, será el encargado de recordar al maestro con un recital de piano. A partir del martes, tendrán lugar las sesiones especializadas, que abordarán temas como la creatividad, el arte de arquetería o la pedagogía musical.