Hace hoy 25 años, el 29 de abril de 1978, abrían sus puertas los Multicines Chaplin. Fue todo un acontecimiento para la ciudad. Primero tenía tres salas. Dos años y medio después, se abrían dos más. Hoy tiene seis. Fue, de esta manera, uno de los primeros multicines que se abrieron en España. Para celebrarlo, Joan Olives, propietario de la sala, ha organizado para hoy un acto consistente en que la entrada cueste sólo un euro y se regalen las palomitas. «La mejor celebración es que la gente venga hoy al cine», asegura.
Fue en 1977 cuando Olives, junto a Pep Truyol, decidió abrir una sala de arte y ensayo en Palma. «Porque amábamos el cine, éramos unos enamorados del séptimo arte». Buscaron un local pequeño: el salón de actos del Estudi General Lul·lià. «Pero finalmente no conseguimos que nos dieran el permiso. Como ya habíamos hecho la inversión, buscamos otro local y así nacieron los multicines Chaplin», explica.
Olives se avanzó a su época. «En España casi no había multisalas, pero nosotros nos dimos cuenta de que la proyección cinematográfica en Europa iba por aquel camino. No nos equivocamos, aunque en aquel momento íbamos contra la corriente, ya que primaban las salas grandes con grandes pantallas. Fuimos pioneros y el resto nos siguieron», declara. La apuesta fue grande, pero funcionó. La inauguración se convirtió en un acontecimiento social. La gente quería asistir a aquellas salas y «el cine se convirtió en un punto de atracción para el barrio, lo ayudamos a crecer». Una atracción que aún hoy perdura.
Desde entonces los Chaplin han apostado por el buen gusto. «Nos hemos especializado en combinar buenas películas comerciales con obras más para cinéfilos», dice Olives. Aún hoy está en el recuerdo de muchos ciudadanos los ciclos que dedicaron a Godard, Truffaut o a los hermanos Marx. Y también la librería, hoy cerrada, especializada en libros y música de cine. «Somos uno de los cines de Palma que mejor conservan el ambiente cinéfilo», declara Joan Olives mientras muestra la decoración de los pasillos y la exposición de maquinaria cinematográfica antigua que puede verse.