I.PERICÀS
Cerca de una veintena de alumnos de danza esperaba con paciencia el
inicio de la primera de las clases magistrales que ayer impartió en
el Conservatorio de Palma la bailarina norteamericana Stephanie
Saland. La bailarina, invitada a Palma por Maria Antònia Mas,
directora del Ballet Joven Mallorca, impartió también este fin de
semana un curso intensivo en la escuela Sant Jaume. Antes de
empezar la clase, Saland explicó que «en el ballet lo importante es
el movimiento del cuerpo, y éste tiene que ser deliberado,
específico y esmerado». Para la bailarina lo más importante es la
relación del cuerpo con la música. «Se tiene que respetar la
música, pero también se tiene que saber diferenciar entre el cuerpo
y el pensamiento».
Saland considera que a la hora de hacer una clase lo más importante es que los alumnos «trabajen para ellos, no por tenerme contenta, tienen que ser conscientes que es por su bien y que si aprovechan todas las enseñanzas que reciban podrán ir a cualquiera lugar». En este sentido, la bailarina y profesora del City of Angels Ballet, considera que es importante que los alumnos «sepan cómo y porqué hacen un ejecicio, y eso vale para cualquier otra actividad de la vida».
En lo que concierne a las recientes manifestaciones del mundo de la cultura en contra de la guerra, Saland considera que «todos los miembros del mundo de las artes tenemos que unirnos y tenemos que unirnos en las voces de protesta para suene más fuerte nuestra queja contra una guerra ficticia y un presidente ficticio».