Este mes se iniciará la cuarta campaña de excavación y acondicionamiento del yacimiento arqueológico del túmulo de Son Ferrer, en Calvià, que permitirá recuperar todo el monumento. Un equipo de arqueólogos y restauradores, encabezado por Manel Calvo, trabajará en el yacimiento mientras que, paralelamente, un grupo coordinado por Víctor Guerrero, en el que colaboran expertos de la UIB, la Universitat de Barcelona y la de Valencia, realizará los estudios.
La viabilidad el proyecto ha sido posible gracias al programa de subvenciones del fondo europeo, Feder, y las aportaciones de la Conselleria d'Economia i Hisenda del Govern balear y el Ajuntament de Calvià. En total, el programa recibirá una subvención de 892.194 euros, cantidad «suficiente para realizar la recuperación completa del túmulo».
Según explicó el arqueólogo encargado del proyecto, Manel Calvo, la campaña, la cuarta que se realiza en este yacimiento desde 2000, tiene previsto empezar las excavaciones en marzo y los trabajos se prolongarán hasta 2005 diferenciando dos fases. Durante el presente año y el siguiente, el proyecto se centrará en los trabajos más técnicos de «excavación, restauración, adecuación y estudio del yacimiento». En una segunda fase, a finales de 2004 y en 2005, el trabajo se orientará a presentar en diferentes formatos de publicación los resultados de los estudios que se hayan hecho «con el fin de acercar a la gente la riqueza arqueológica de este yacimiento».
Tal como explicó el regidor de Urbanismo de Calvià, Antoni Garcia, la recuperación del cien por cien de este yacimiento «clave dentro del parque arqueológico del Puig de sa Morisca permitirá vincular la oferta del municipio con una sólida e interesante oferta cultural». El hecho de que el túmulo de Son Ferrer esté localizado junto al Passeig de Calvià, la importancia de los restos hallados y el hecho de que el yacimiento «se integra en un entorno especialmente interesante» son, en palabras de García, atractivos suficientes para trabajar en su recuperación.