EFE - NUEVA YORK
La cantante Norah Jones se convirtió en la gran triunfadora de la
45 edición de los premios Grammy, entregados en la madrugada de
ayer en Nueva York, al llevarse ocho estatuillas, incluidas mejor
álbum, canción, disco del año y mejor nueva artista.
«En un momento en el que el mundo está muy extraño, sólo quiero decir que me siento bendecida por haber tenido un año tan bueno», dijo Jones, de 23 años e hija del legendario intérprete de cítara Ravi Shankar, que mezcla en su música el jazz, el country y el pop. Su disco ha vendido más de 6 millones de copias en todo el mundo, y su canción «Don't know why», compuesta por Jesse Harris, ha sonado en todas las radios del orbe. Detrás de Jones en el total de premios se ubicó el grupo de música country Dixie Chicks, que ganó cuatro Grammy, al mejor álbum e interpretación de country, así como mejor interpretación instrumental en country y mejor diseño de disco.
El veterano rockero de Nueva Jersey, Bruce Springsteen, se llevó tres Grammy como mejor canción de rock y mejor interpretación vocal de rock por «The Rising», así como mejor disco de rock por el de mismo título. El grupo No Doubt se llevó el Grammy al mejor grupo o dúo de pop, mientras la mejor interpretación masculina de pop fue para John Mayer, por su canción «Your body is a Wonderland». Eminen ganó el Grammy por mejor álbum de rap y la banda de rock Foo Fighters como la mejor interpretación de una banda de rock pesado. La ceremonia de entrega de los premios, que regresó a Nueva York desde Los Angeles después de cinco años, se celebró en el Madison Square Garden en medio de estrictas medidas de seguridad.