M.DíAZ
La reciente jubilación no le ha parado. Al contrario, Guillermo
Rosselló Bordoy, ex director del Museu de Mallorca, dedica sus días
a la investigación y estudio de aquello que ha sido su profesión,
la arqueología y la historia, especialmente de la cultura islámica.
El pasado día 30 de noviembre presentó en Algeciras el volumen «El
ajuar de las casas andalusíes» y el próximo día 9 lo hará en
Mallorca, en la sede de la Sociedad Arqueológica Luliana.
El texto es un «libro divulgativo» sobre cómo era la vivienda de la cultura árabe entre los siglos X al XV a través del mobiliario, cocina, vestimenta, música, juegos e iluminación, desde la vivienda más modesta hasta la más rica.
Las excavaciones y objetos artísticos o de uso común encontrados en ellas son el origen de la investigación, pero también los textos literarios como «Las cantigas» de Alfonso X o la iconografía. «Hoy los temas de vida cotidiana están de moda porque, afortunadamente, la historia ha dejado de ser los grandes capitostes y las batallas para interesarse por los ciudadanos de a pie que la hacen», explica Rosselló Bordoy. En este contexto se inscribe este trabajo, que toma numerosas referencias de Mallorca, y que fue un encargo.
Los materiales orgánicos como el tejido o la madera desaparecen con el tiempo, por eso el arqueólogo, para este tipo de trabajos, como es la reconstrucción ideal del hogar andalusí, se basa en lo que se conserva. Muchos de los objetos que le han dado información son mallorquines. Por ejemplo, un elemento que se encuentra en el museo de la Seu, recientemente restaurado, una arqueta islámica de marfil, decorada a base de inscripciones y mujeres desnudas que tocan instrumentos. Rosselló Bordoy estudia el significado de estos grabados que decoran el exterior de la joya.