El artista Josep Maria Sirvent ha creado una gran escultura en hierro y granito para los jardines de La Zarzuela. La obra, que se instaló el pasado jueves tras un laborioso proceso, fue un encargo personal que hizo don Juan Carlos a este artista, que el próximo mes de abril inaugurará en el Casal Solleric de Palma una exposición en la que repasará su trayectoria artística.
Josep Maria Sirvent aseguró ayer que empezó a trabajar en esta obra hace un año y medio, cuando el galerista Pep Pinya y él recibieron el encargo del Rey de crear una escultura para su colección particular, una obra que se instalaría en los jardines de la Zarzuela, junto a otras piezas de artistas de prestigio internacional como Eduardo Chillida, Armando Pomodoro o Santiago Calatrava, que ha creado una de las últimas aportaciones de la colección.
«Hubo diversos contactos y conversaciones, de donde salió la idea de crear una escultura que representa una puerta. ¿Por qué la puerta? Porque para mí es un elemento de unió, de transmisión, no algo que cierra, que esconde lo que hay detrás. Mi puerta es un elemento que se sitúa en el presente pero es una puerta abierta al pasado y al futuro», explicó ayer el artista.
Josep Maria Sirvent declaró que desde el primer momento «encontré absoluta libertad para crear». Una libertad que también halló a la hora de buscar la mejor ubicación en los jardines de La Zarzuela para situar su escultura. «Hubo diversos viajes para encontrar la mejor situación. Y creo que la encontramos. La escultura se ha instalado finalmente en una especie de claro, rodeado de pinos que crean una especie de ábside. Es un lugar recogido y tranquilo de este jardín amplio y equilibrado». Como en todas las esculturas que se sitúan en los jardines de la residencia real, la obra se ve perfectamente desde las ventanas de la casa.