La preservación y conservación del patrimonio marítimo, un proyecto cultural largamente reivindicado en Mallorca, constituye al fin un objetivo institucional al ser inaugurada ayer la exposición «Feim el museu de la mar» en la Capella de la Misericòrdia del Consell de Mallorca.
Una muestra que, a partir de una mirada retrospectiva al museo desaparecido y la posterior demanda social por su recuperación, aglutina numerosos elementos vinculados a la historia marítima de Mallorca, como pinturas al óleo, maquetas, herramientas de Mestres d'aixa, instrumentos náuticos, libros, exvotos marineros, grabados, dioramas y documentos antiguos, como parte material del contenido de este proyecto, cuya estructura y objetivo cultural se explican en clave divulgativa gráfica y audiovisual, con vistas al horizonte de la futura institución.
El acto, presentado por María Antonia Vadell, consellera de Cultura del CIM y el director insular, Miquel Àngel Marià, se enmarca en una propuesta de plan director elaborada por encargo de este departamento, en una iniciativa abierta a la participación ciudadana y a las aportaciones de las entidades interesadas. En este sentido, Vadell indicó que, «establece las líneas básicas de actuación para la investigación, conservación y divulgación de este legado y delimita los recursos financieros, profesionales y de infraestructuras para conseguir estos objetivos».
Al respecto, Vadell recordó que el Museu de la Mar constituye una antigua demanda social expresada por la Associació d'Amics del Museu Marítim, tras la desaparición del antiguo museo, ubicado durante más de veinte años en el Consolat de la Mar. Con el nuevo plan director se establece el embrión del futuro proyecto museístico interrelacionado y territorial, que tendrá una estructura de red genérica y contenido temático diversificado en seis municipios iniciales: Palma, como sede central; Sóller, en el oratorio de Santa Catalina; Alcúdia, en la Torre Major, junto a Portocolom, Ses Salines y Calvià a partir del concepto básico del mar.