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Ocho novelas y 42 poemarios competirán en esta edición de los Premis Ciutat de Palma

Este año se entregará por primera vez un premio de Urbanismo, que distinguirá a la mejor rehabilitación

Los ganadores recibirán una escultura de Jaume Mir.

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Un total de ocho novelas y 42 poemarios competirán el próximo día 20 de enero, festividad de Sant Sebastià, en los Premis Ciutat de Palma Llorenç Villalonga de Novel·la y Joan Alcover de Poesia, que se entregarán durante la tradicional cena de gala que tendrá lugar en la Escola d'Hosteleria. Esta cifra, sensiblemente inferior a la del año pasado, cuando se presentaron 12 textos narrativos y 71 poesías, podría incrementarse en los próximos días, ya que se pueden recibir aún originales por correo siempre y cuando se hayan depositado antes de la fecha en la que se cerró el plazo.

El departamento de Cultural del Ajuntament de Palma, que es el encargado de organizar los premios, también ha confeccionado el jurado en cada una de las categorías. El jurado del Premi Llorenç Villalonga, dotado con 15.000 euros, estará formado por: Sebastià Alzamora, Jaume Cabré, Joan Josep Isern, Joan Mas y Antònia Vicens. El Premi Joan Alcover de poesía, cuyo ganador recibirá 6.000 euros, contará con un jurado cuyos miembros son los escritores Víctor Gayà, Maria de la Pau Janer, Manel Oller, Jaume Pérez y Sam Abrahams.

Por su parte, en la gala también se entregará el Antoni Gelabert d'Arts Plàstiques, premio dotado con 12.000 euros. El jurado que decida el ganador en esta categoría está también decidido y lo forman la crítica Maria Lluïsa Borràs; el director de la revista «Arte y parte», Fernando Huici; la comisaria Neus Cortés; el fotógrafo Toni Catany; y los artistas Eva Lootz y José Manuel Broto.

Este año se entregará un nuevo galardón, el Ciutat de Palma de Urbanisme, con el que el Ajuntament quiere premiar al arquitecto y promotor que hayan hecho la mejor rehabilitación.

Por otra parte, a partir de este año los ganadores recibirán, además del premio en metálico, una escultura de Jaume Mir. Se trata, según el mismo artista, de una obra «que quiere simbolizar el hecho de que para los ganadores este galardón significa un lanzamiento hacia la búsqueda de otros objetivos, un punto de partida hacia mayores éxitos». También simboliza «el espíritu de libertad y de aventura de los artistas».

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