Maria de la Pau Janer, finalista del Premio Planeta de Novela 2002 con el título «Las mujeres que hay en mí», declaró ayer en Madrid que ha superado su «meta más cercana al salir del círculo estrictamente catalán y pasar al resto del ámbito español» y se plantea una próxima reescritura de la obra al catalán. Janer, que presentó el libro junto al ganador, Alfredo Bryce Echenique, reconoció que la novela podía acabar en un cajón: «Tenía miedo de que el castellano que había empleado para mis artículos no fluyera de la misma manera para una novela.
Poco a poco percibí que la atmósfera y los tonos fueron fluyendo y cuando la terminé, la pulí con una atención especial». Confesó que en ella también coexisten varias mujeres: «Sigo siendo la misma que ha escrito siempre, la mujer que tiene miedo de entrar en un ámbito nuevo de literatura, la que quiere defender su obra porque cree en ella, aunque con las inseguridades propias de cualquier autor y a la vez, supongo que también están en mí todas las mujeres y los personajes en el sentido más amplio de mi libro».
Muchos son los sentimientos propios que reconoce haber destilado entre sus personajes femeninos, aunque asegura que no es tan fácil descubrirlos porque «con los años aprendes a disfrazarte más. En las primeras novelas eres más impúdica por inocencia e inexperiencia. Después es más difícil encontrarte, pero estás siempre».