El escritor Carlos Garrido presentó ayer el libro «La isla de las ensaimadas» (Edi. Olañeta), un relato que ironiza sobre el presente a través de nuestro pasado más remoto: la época talayótica. El libro presenta a Balio, un personaje poco explotado en la tradición literaria insular. Garrido dice que «cuando vemos el nombre de Illes Balears no nos preguntamos de dónde procede. Hay varias hipótesis y una de las más plausibles es que el término baliar procede del personaje de la mitología griega Balio, que acompañó a Heracles al jardín de las Espérides y que de vuelta se quedó en la Isla».
«La isla de las ensaimadas» es una sátira de los problemas actuales de Mallorca: saturación, venta de territorio, olvido del pasado, contado en un formato entretenido. El autor contrasta este desencanto con gran conocimiento de la historia, en su vertiente arqueológica y sociológica. La publicación está ilustrada por el mismo autor. «En mi juventud hacia cómic, y ahora he retomado un poco esta afición», señaló.
Para la realización del libro Garrido ha analizado concienzudamente el mercado editorial: «Hoy en día hay que ofrecer al público cosas un tanto enraizadas con la sociedad actual, sin perder por ello la perspectiva del pasado. El mercado vigente es muy veloz, si los libros no se venden en un plazo determinado, el encargado del almacén se precipita a quemar el excedente. Es una barbaridad». El título del libro hace referencia al signo sagrado de Balio, con forma de espiral. «Está enterrado con el guerrero y tiene forma de ensaimada. Está contrastada la existencia de espirales neolíticas como formas simbólicas».