La asociación ARCA y el Grup d'Estudis de les Fortificacions de Balears (GEFB) hicieron pública ayer una nota en la que piden al Consell de Mallorca que recupere el edificio del Temple tal y como era, una puerta de murada islámica, y que evite que este monumento se pueda destinar a viviendas, tal y como está proyectado hacer.
En palabras de estas dos asociaciones, «el Consell de Mallorca tiene que actuar con la máxima celeridad y cambiar de actitudes por lo que se refiere a este monumento. No se entiende por qué no compraron el edificio cuando el promotor de la obra, en cumplimiento de lo que establece la Llei de Patrimoni, se lo ofreció. No se entiende por qué ordenó unos estudios arqueológicos para determinar la evolución histórica del edificio, cuando por todos es conocida. Estos estudios han provocado el repicado de la fachada, lo que ha implicado quitar toda la protección a la tapia islámica, poniendo en peligro su integridad».
Tal y como se puede leer en la nota, El Temple, una puerta de la muralla islámica, «es un monumento de excepcional importancia que requiere un cuidado muy especial por parte de la Administración». En palabras de estas dos asociaciones, recuperar el estado original del edificio supone «la eliminación de las ventanas que dan a la calle y derrumbar el cuerpo añadido situado entre las torres». Una labor que es «indispensable». Desde ARCA y la GEFB, permitir el uso como vivienda y no derrumbar los añadidos «no lleva más que a la pérdida definitiva del edificio y no aprovechar una oportunidad histórica para su definitiva recuperación».