«Desde esta semana y hasta el año que viene se celebrarán una serie de actividades con las cuales se pretende recuperar la memoria y las aportaciones de Francesc de Borja Moll a nuestra lengua y cultura». Así explicaba Damià Pons, conseller de Cultura del Govern, el inicio de los actos del Any Moll, que conmemorará el centenario del nacimiento del lingüista. Con este año se pretende «difundir y dar un alcance social amplio e intenso, más allá de los círculos de erudición, de la figura, obra y valores de Moll, con el objetivo que la sociedad asuma como propios sus valores», añadió Pons, quien puso especial énfasis en «la lealtad, el rigor en el uso y la defensa del idioma» que realizó Moll.
Por su parte, Aina Moll, la hija del lingüista, quiso «agradecer de todo corazón» la celebración de este año «y no porque no sea merecido, ya que llevó a término su tarea cuando estaba en grave peligro, sobre todo en el periodo que comprende de 1950 a 1962, época en la que se convirtió en el principal núcleo de resistencia cultural de Balears, cuando trabajó siempre encaminado a la recuperación de nuestra lengua».
Después de la aprobación del Parlament balear de la declaración del Any Moll el pasado 12 de marzo, se creó una comisión encargada de planificar las actuaciones institucionales, unificar los esfuerzos administrativos y contribuir al proceso de normalización de la lengua catalana. Esta comisión se divide en tres comités, el de honor, el organizador y el técnico, de los que forman parte las diferentes instituciones y entidades que participan en el Any Moll, como es el caso del Govern balear, los tres Consells, la Obra Cultural Balear, el Institut Menorquí d'Estudis, los ayuntamientos de Ciutadella y Palma, en representación del cual asistió al acto Carme Feliu, además de personas que estuvieron relacionadas con Moll como Joan Veny, Joan Miralles o Josep Grimalt.
Por lo que se refiere a las actuaciones que se realizarán, tal y como explicó Joan Melià, director general de Política Lingüística del Govern balear, se dividen en cuatro ámbitos. De esta manera, los ejes son el ámbito organizativo; el de carácter académico y de apoyo a la investigación; el de difusión social del Any Moll y, por último, el de difusión social de la obra de Francesc de Borja Moll.