Una acuarela de Paul Klee y dos cerámicas de Miquel Barceló son algunas de las obras con las que se enriquecerá próximamente la colección permanente del Museo Reina Sofía, «que está constantemente incrementando sus fondos», según el director Juan Manuel Bonet.
Bonet señaló que la obra de Paul Klee, que está a punto de entrar en el museo, ha sido comprada por algo más de 240.000 euros a una galería londinense. «Se trata de una maravillosa acuarela que perteneció a André Bretón».
Bonet destacó el esfuerzo realizado para adquirir obra de Miquel Barceló. «A las dos obras y un bronce que se compraron en 2000 se suma la obra gráfica completa que el artista está donando y actualmente estamos en proceso de compra de dos cerámicas».
Las compras de arte contemporáneo van a cambiar la futura colección y, en particular, el esfuerzo realizado en las adquisiciones de fotografía se verá reflejado cuando este finalizada la ampliación del museo.
«La práctica totalidad de los nombres fundamentales de la fotografía de los 90 se han incorporado a la colección en los dos últimos años», recordó Bonet, para quien en la actualidad el museo podría hacer exposiciones sobre pintura europea y americana de los 80 y 90 «en las que habría pocas lagunas».
En el futuro se incorporarán obras de Picasso, Gris, Torres García, Tàpies, Saura o Broto.